Bellas y Bestias: Elsa Pataky

Hermosa, lustrosa, apetitosa son adjetivos que inmediatamente acuden a la lengua cuando se mira a esta beldad núbil que parece escapada de una égloga de Garcilaso. Con oveja y todo. Sin embargo, su estampa pastoril no logra ocultar cierto desasosiego, cierta cualidad inquietante que baña todo el conjunto.
¿Los ojos, por ejemplo, de qué color son? Unas veces son verdes, otras azul aguamarina, otras brillan con los grises translúcidos del aire. La pastorcilla ¿es mala o es buena? ¿Sostiene a la ovejita en los brazos para arrullarla mejor o planea asarla al horno? ¿Es una ninfa acuática o una sirena que ha cambiado los arroyos y los cursos de agua navegable por las piscinas privadas de la Moraleja? ¿Existe?
El cloro forma parte de su encanto. Sin duda los ojos se encienden con bombillas de sangre mientras las gotas de agua chorrean por la piel, suicidándose una a una. Al salir del agua, la ninfa se exprime el pelo como si escurriera un rayo de sol perdido en su melena y luego lo pusiera a secar en el tendedero abismal de la espalda. Siempre que cierra los ojos y se tumba para broncearse, tiene trece años, la edad de las lolitas, de las niñas perversas que hacen como que no saben lo letales que son y que chupan piruletas como si fuesen piruletas.
No obstante, la niñez incandescente ha dejado en su belleza un fulgor banal, insustancial, como un asado crujiente pero demasiado crudo por dentro, un cuento sin moraleja, una fábula alegre y tontorrona: Caperucita sin lobo, pastorcilla sin rebaño, sirena con piernas, rubia con filtro. El oro de los cabellos no acaba de decidir en qué banco invertir sus acciones, y el pasado no acaba de asentarse en ese rostro donde lo más firme no son ni el color de las pupilas ni el mohín de los labios ni la naricilla pizpireta sino un par de mofletes infinitamente pellizcables. Mejillas de porcelana con el rubor de la vergüenza incorporada en el catálogo universal de las muñecas hinchables. No hay nada de plástico en ella y, sin embargo, parece enlatada y envasada al vacío. El modelo del que nunca hay existencias, el que todo el mundo solicita en sueños.
Porque, ciertamente, la inexistencia es su categoría ontológica. Hasta Garcilaso sabe que jamás hubo pastorcillas, que las sirenas jamás salen del mar y que las lolitas en sazón acaban en dolores y lolailos. Pero ella se empeña en enseñar los muslos sin escamas, en prolongar la infancia más allá del trampolín, en caminar sobre las aguas. Se empeña en hacer durar lo que no puede durar más allá del revolcón de una noche, la luz en la ventana, el desengaño del chorro de la ducha llevándose por el desagüe las alas de las mariposas, el polvo de las hadas.
No se sabe cómo el tiempo acabará por labrar este rostro tan dulce y tan tibio donde todo está aún por escribirse: los amores terribles, los pecados amargos, las desilusiones. Tal vez los recuerdos no puedan cincelarse sobre la porcelana ni dejar marca en las muñecas, por hermosas que sean. Tal vez las sirenas se lavan demasiado y el agua termina por arrastrarlo todo.
El caso es que esta belleza parece tejida con la luz misteriosa de las películas, hecha con el miedo a despertar, a lavarse la cara por las mañanas y descubrir que los sueños son sueños. Al fin y al cabo, las sirenas nunca salen del mar y las lolitas siempre tienen trece años: la misma edad en que mueren. Cuando las niñas perversas exilian a sus ovejas de peluche bajo la cama y dejan de creer en las hadas.
(Del libro BELLAS Y BESTIAS, ed. Sloper: http://www.editorialsloper.es/ )
Etiquetas: Bellas y Bestias, david torres, Elsa Pataky, Garcilaso, literatura
14 Comments:
Más bien su belleza ha sido tejida por la quirúrgica precisión de un cirujano. Diestro sastre de epidermis.
Ya era una chica mona en "El arte de morir" pero hoy resulta una Frankestein moderna pero apetitosa, dice aquí mi coleguilla Pablo. David, tu libro Bellas y Bestias está muy bien. Por cierto, ¿no se te ha enfadado el personal? A veces eres tan crítico...
¿Pataky monstruo, o sea, bestia? Es entonces el modelo sumo de tu libro, la bella bestia o la bestia bella por antonomasia. Ya podemos ir avisando a los fans de que el 12de junio hay presentación en Madrid en Hotel Kafka. Me he enterado de que te presenta Bellas y Bestias Roberto Esteban.
Qué maravilla la edición de Sloper. ¿De dónde ha salido esta editorial?
Pataky es el summum de la voluptusoidad. Por ella me he hecho adicto a los helados de La Lechera.
Romero
¿Alguien sabe quién es el tal Taky, al que le han asignado a este prodigio de la ciencia biónica, mezcla de "femme fatale" y Mr. Spock?
Fdo: Adrian Brody, tonificante.
Querido David por muchos piropos que me eches es imposible que yo te corresponda... ¡qué es esto de usar tu blog para tratar de ligar!
En cuanto a lo que ves no es más que mi exoesqueleto (como el de Ironman). Tendrías que ver lo que llevo debajo.
¡Madre del amor hermoso! Tremenda dama. Por muy recauchutada que digan que esté, eso son neumáticos y no los de mi coche.
Por cierto, D. David. Hoy he disfrutado de una estupenda comida y una no menos excelente sobremesa acompañado de un Ramón Allones que me consta fehacientemente fue recomendación suya. No sé si con las pistas ofrecidas sabrá ya quién fué mi acompañante. En cualquier caso, muchas gracias por la recomendación. Ha sido una autentica delicia.
Abrazos,
Pedro de Paz
Anónimo, cuando yo escribí el artículo, la chica estaba sin retocar. Creo.
Solhuerta, con Bellas y Bestias sólo he hecho amigas.
Romero, no te hagas ilusiones, que Roberto no vendrá el 12 a la presentación. No le van nada los saraos literarios.
Adrian Brody, Taky es un tío con suerte. O no.
Paquita, ah, ¿pero un blog no era para ligar? A mí me han engañado entonces.
Pedro, me imagino quién. Sí, el Ramón Allones es un gran puro que permite todo tipo de rimas.
"Y que chupan piruletas como si fuesen piruletas", jajajajajaja.
A mí lo que más me gusta de la Pataky es su judío.
Tiene estrella más que belleza la muchacha del judío, en cuanto a mi las bellezas tan escandalosas me empalagan, no obstante quizás vaya bien para la industria...Así, como llaman al cine en Hollywood...Yo soy más de Leonor Waitling, Natalia Verbeke y la misma Nawa Jimri, espectacular en las distancias cortas y responsable de mis alteraciones sanguíneas.
A mi lo del blog me parece un medio tan legítimo como cualquier otro para tratar de ligar, por qué no. Es más, yo incluso diría que probablemente no te hayan mentido acerca de sus efectos. Incautas hay en todos sitios, no iba a ser menos este melonar.
Y ojo con no pasar por alto lo de incautas, porque me da que lo de dejarse atrapar por el blog es como ser la del tercero y comprar sardinitas frescué al tío de Santurce, sin ni haber visto qué te está vendiendo, que la famosa foto nunca la colgaste David.
Yo gracias a Dios soy mucho más sensata, y antes de ser susceptible de engrosar la lista de víctimas del comúnmente conocido como efecto blog, me intentaré pasar por el retiro, honky tonk o similar a comprobar qué es lo que realmente hay detrás de tantas y tan bellas palabras. Carlota
Buenas David, te leo desde hace poco, te descubrí de puñetera casualidad, leyendo el blog de una tal Beta. Me imagino que te sonará. Bueno, el caso es que me encanta como escribes y coincido plenamente con muchas de las cosas que he leído por aquí. Qué bien que haya gente que sepa pensar y hacer partícipe a los demás de ello. Por cierto, tras leer la entrada "niños de tiza" creo haber leído pensamiento atemporal y genérico. Creo haber leído auténtica Filosofía, tío. Por descontado que coincido y me identifico plenamente con lo que cuentas. Puedes considerarme un ciber colega más. Hasta otra.
Alguien que escribía sobre arte dijo que la belleza sólo tiene un rostro y la fealdad muchos.
Es decir, que para consuelo de los feos, un defecto da la cara una multiplicidad de significados de los que la perfección carece. Una nariz larga, un lunar en un lugar incorrecto… humaniza, y quita esa terrible sensación en la que se ha sumergido de lleno Adrien Broddie de estar con una con una muñeca de goma, con una barbie plastificada. Una mujer de un solo rostro cansa, agota, extenúa. Eso me pasó con mi última novia.
¿Será Elsa humana o humanoide? Aunque da una sensación muy atrayente de algo cálido y blando. Y es que Elsa huele a chicle de fresa, es como la goma de mascar.
Yo, cuando regresaba a París de alguna batalla, enviaba siempre enviaba este mensaje a Josefina: “Je rentre, ne te lave pas”
Fdo: Napoleon Bonaparte
Ub, allá Vd.
Javier Divisa, Leonor Waitling sale retratada en Bellas y Bestias.
Carlota, el dia 12 de junio a las siete y media, presento los libros en Hotel Kafka. Lo digo porque jugar al azar es muy complicado.
Desde-plutón, muchas gracias.
Napoleon, Vd. dice eso porque es un enano con mala leche. Todas mis novias han sido siempre guapísimas y todas de una manera completamente distinta a la otra. Si se fija bien, en el retrato de la Pataky, podrá comprobar que no es mi tipo.
David, ya me imagino que tus novias eran guapas, incluso una de ella era bailarina de flamenco.
Besos
Fdo: Napoleón Bonaparte
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